Illia, Alfonsín, legado ético

118 AÑOS POR LA VIDA, POR LA PAZ
LOS PRIMEROS CLUBES PARROQUIALES DE LA UNIÓN CÍVICA

Notas históricas
Por Ricardo Laferriere
Transcribiré una serie de informaciones que figuran en el libro "UNION CIVICA - Su origen, organización y tendencias - Publicación oficial", editado al cumplirse un año del Meeting del Teatro Jardín Florida que tuvo lugar el 1º de setiembre de 1889. La siguiente corresponde a la primera de una serie de reuniones constitutivas en las que se fueron organizando los diferentes "Clubes" en la Capital Federal y corresponde al primer Club Parroquial fundado el 16 de setiembre de 1889, en la parroquia de Belgrano.
En notas sucesivas se transcribirán las formaciones de los Clubes Parroquiales en las parroquias de La Concepción, San Telmo, San José de Flores, Balvanera, el Socorro, San Nicolás, la Piedad, Monserrat, Catedral al Norte, San Cristóbal, Catedral al Sur, San Miguel, San Juan Evangelista, Santa Lucía y San Cristóbal, en reuniones que comienzan con la mencionada de Belgrano (16 de setiembre de 1889) y terminan con la última mencionada, el 15 de julio de 1890, apenas diez días antes de la Revolución.
Su importancia histórica estriba en que son los documentos originarios más cercanos a los hechos fundacionales y conforman las raíces institucionales más antiguas de la organización que luego daría orígen a la Unión Cívica Radical.
"CLUB UNIÓN CÍVICA DE BELGRANO
El centro político de este nombre, instalado el 16 de Setiembre de 1889, de acuerdo con el programa de la Unión Cívica de la Juventud, tomó la siguiente organización provisoria:
Presidentes honorarios: teniente general Bartolomé Mitre, Mariano Billinghurst.
Comisión directiva: Presidente, Adolfo J. Pueyrredón; vice 1º, Julio Gorini; vice 2º, Alberto Ponsati; secretarios: Alberto Caprile; id. Arturo Etchegaray; tesorero: Nicolás Passeggi Donati; delegados: Julio Govini, Eduardo Beovide.Vocales: Alberto J. Etchegaray. Ricardo Junior, Luis Gowland (hijo), Adolfo Calvete, Adolfo González Bonorino, Antonio J. Storni, Juan A. Podestá, Mauro Matti, Adolfo Basavilbaso, Manuel Gradín, Enrique Caprile (hijo), Celestino Garay, Américo Bollero, Emilio G. Horrochs, Emilio Matti, Pantaleón Sánchez, Pastor Jurado, J. Velázquez, Julio Molina y Vedia, Juan P. Llerena, Lorenzo Arseno, Andrés Arseno, Carlos G. Balcarce, Juan B. Loñatz, Pedro Molfinco, Enrique M. Alvarez.
Comisión de propaganda: Adolfo Calvete, Juan Llerena, Adolfo González Bonorino, Pastor Jurado, Carlos Balcarce, Luis Gowland (hijo), Emilio Matti, Julio Molina y Vedia, Enrique M. Alvarez, Enrique Caprile.
Los señores Mitre y Billinghurst, nombrados presidentes honorarios, aceptaron el cargo en los siguientes términos:
“Buenos Aires, Setiembre 20 de 1889.
Al presidente del Club Unión Cívica de Beltrano, Sr. Adolfo J. Pueyrredón:
He tenido el honor de recibir su nota del 16 del corriente, por la cual se sirve comunicarme que en esta fecha se ha instalado en la parroquia de Belgrano un comité con la denominación de Club Unión Cívica de Belgrano, cuyos propósitos son los proclamados en el meeting de la juventud independiente de Buenos Aires, manifestándome a la vez, que conjuntamente con el meritorio ciudadano Sr. Mariano Billinghurst, el mencionado club ha tenido a bien nombrarme presidente honorario.
Simpatizando de todo corazón con los propósitos del Club Unión Cívica de Belgrano, y honrándome de figurar a la par del digno ciudadano señor Mariano Billinghurst, acepto agradecido la distinción que mis conciudadanos de Belgrano han querido dispensarme, ofreciéndoles mi concurso en cuanto valga y pueda, y haciendo votos porque el patriotismo los inspire en todos sus actos y vean realizados los generosos ideales a que aspiran cumpliendo sus deberes cívicos.
Con este motivo me es grato saludar a todos y a cada uno de los dignos ciudadanos que componen el Club Unión Cívica de Belgrano con mi mayor consideración y toda mi simpatía. BARTOLOMÉ MITRE.

“Buenos Aires, Setiembre 18 de 1889.
Al presidente del Club Unión Cívica de Belgrano, Sr. Adolfo J. Pureyrredón:
Simpatizando con toda mi alma con el movimiento operado por la juventud argentina, que se levanta a ocupar el puesto que la ley y la patria le designan, y penetrado de que es un deber ineludible de todo argentino concurrir con su voto a la creación de las autoridades que han de regir sus destinos, acepto con verdadero placer el honor que se han dignado acordarme de segundo presidente honorario del comité parroquial de Belgrano.
Lamento tan solo que mi avanzada edad no me permita otra cosa que acompañarlos con mi voto y mis deseos de verlos triunfar en los comicios.
Dejando así contestada la nota que el señor presidente me ha dirigido, les saludo con mi más alta consideración.
MARIANO D. BILLINGHURST”






Continuando con la transcripción de la información extraída del libro "UNION CIVICA - Su origen, organización y tendencias", van a continuación las notas correspondientes a la formación de los clubes de la Concepción y de San Telmo.
"CLUB DE LA CONCEPCIÓN
El domingo 30 de Setiembre de 1889, tuvo lugar la instalación del club independiente de la Concepción.
El acto se verificó en el local de la calle Cambaceres núm. 963, que había sido adornado convenientemente. Al frente del salón se había improvisado una tribuna, a cuyos lados habíanse colocado los bustos del general Mitre y del doctor Adolfo Alsina.
La concurrencia fue tan numerosa que llegó a ser pequeño el recinto para contenerla.
Entre los asistentes había muchos antiguos y prestigiosos vecinos de la parroquia, mezclados a los representantes de la nueva generación, que formaban la mayoría.
A las 2,30 p.m., después de ejecutado por una banda de música el himno nacional, el doctor Isaac P. Areco pronunció un hermoso discurso, en el que manifestó el objeto de la reunión, e hizo resaltar la deplorable situación porque atravesaba el país, en materia de instituciones y de respeto a los derechos de los ciudadanos. Recordó la iniciativa tomada por la juventud independiente y la necesidad de secundarla por todos los medios legales.
Siguió en el uso de la palabra al Dr. Areco, el Dr. Martín A. Martínez, quien se extendió en oportunas consideraciones sobre el ejericio del derecho electoral, y sobre la desaparición de las instituciones comunales, concluyendo por incitar al pueblo a concurrir a la inscripción próxima.
El señor Fermín Rodríguez pronunció un entusiasta discurso, en el que expuso el caráctar de la lucha electoral que se iniciaba y los deberes que la situación política del país imponía a los buenos ciudadanos.
El señor Rodríguez terminó invitando a los miembros de la Unión Cívica de la Juventud, allí presentes, a hacer uso de la palabra.
La concurrencia pidió que hablaran los doctores Barroetaveña y Gouchón.
El Dr. Barroetaveña insistió sobre la responsabilidad que correspondía al pueblo por la afligente situación del momento, a causa de su alejamiento de la acción cívica, y recordó el deber y la necesidad de reaccionar contra la apatía general, cumpliendo deberes sagrados.
Dr. Gouchón evocó el recuerdo de los grandes hombres de la revolución de Mayo, y dijo que el pueblo debía inspirarse en sus virtudes cívicas y en su acendrado patriotismo.
Los oradores fueron interrumpidos varias veces por los aplausos y las aclamaciones de la concurrencia.
Fueron en seguida aclamados los principios y declaraciones contenidos en el programa de la Unión Cívica, base de los trabajos del nuevo centro independiente.
Fue por último proclamada la siguiente lista del personal del comité directivo:Presidentes honorarios: General Bartolomé Mitre, Dr. Mariano Marín.
Presidente efectivo: Fermín Rodríguez.Vicepresidente: Dr. Martín A. Martínez. Secretarios: Guillermo Zapiola, Juan Cruz Goñi, Tomás Viera, Jorge M. Méndez.Tesoreros: Manuel B. Fernández, Eduardo Casares.Vocales: D. Ernesto Weigel Muñoz, José Santos Pardo, Dr. Eduardo Copmartín, Alfredo B. Fernández, Nicolás Nocetti, Abraham Rosquellas, Salustiano Galup, Pascual Uriarte.
COMISIÓN DE PROPAGANDA
Presidente: Dr. Isaac P. Areco.Vice presidente: Nicanor Ezeiza. Secretarios: Patricio A. Smith, Germán Ramírez, Fermín Rodríguez (hijo), Abraham Ferrari. Vocales: Eladio J. Otamendi, Dr. Tedro C. Iturralde, Aristóbulo Durañona, Benito Casal, Miguel Smith, Ramón Duán, Benito Vázquez, Juan Francisco Oliver, Dr. Antonio M. Ferrari, Juan Coronado, José María Durañona, Rafael Cutó, Luciano Laplace, Cornelio C. Viera, Luis Rodríguez, Eladio Canedo, Camilo Rodríguez, Alberto S. Fernández, Angel Aguilar, Eustaquio A. Méndez, Florencio Nevares, Julio Morales, Luis Duprat, J. J. González, Manuel Durañona, Rómulo Campodónico, Enrique Llanos, Gregorio Suasnabar, Emilio Cárdenas, Santiago Musis, Poedro M. Barreira, Zacarías Bonorino, José M. Zapiola, León Carranza, Juan Capurro, Francisco Ramos, Agustín Uriarte, Arturo M. Amoedo, Doctor Felipe M. Amoedo, Dr. Martín Spuch, Francisco Bulnes, J. Goicochea, Juan Azarini, Carlos Raíces, Ventura Facio, Augusto A. Fernández, Cecilio Roca, Gabriel Jáuregui, Roque M. Perroni, Gabriel E. Ochoa, JoséA. Fernández, Enrique Benavente, Nicolás Nocetti (hijo), Gregorio C. Viera, Bernardino S. Grenslevin, Eustaquio Barreira, Angel Moldes, Viente P. Musis, Domingo Nocetti, Luciano Pereyra, Pedro Núñez, M. González Vela, Enrique Repetto. – Siguen trecientas veinte firmas.
A las 4 p.m. terminó el acto, en medio del mayor orden y de gran entusiasmo.
Una parte de la concurrencia acompañó hasta su domicilio al Sr. Fermín Rodríguez, presidente del club y uno de los más activos promotores del patriótico movimiento, al cual de tan espléndida manera ha respondido, una de la primeras, la importante parroquia de la Concepción.
CLUB SAN TELMO
El domingo 6 de Octubre de 1899, tuvo lugar la instalación del club independiente de la parroquia de San Telmo.
A pesar de los atractivos excepcionales del día, en distintos puntos del municipio, la concurrencia fue numerosa.
A las 2 p.m. el Sr. Martín M. Torino, que presidió el acto, expuso en breves y expresivas palabras el objeto de la reunión, que era constituir un club electoral de acuerdo con los principios proclamados en el meeting del 1º de setiembre.
Se dio lectura de las declaraciones de la Unión Cívica de la Juventud que consignan dichos principios, siendo acogidas con grandes aplausos.
Fueron aclamados en seguida, para formar la comisión directiva del nuevo centro, los siguientes señores:Presidentes honorarios: general Bertolomé Mitre, Dr. Leandro Alem; Presidente efectivo, doctor Matías Zapiola; vice 1º, Francisco Casares; vice 2º, Martín M. Torino; secretarios, Pedro Benoit, Dr. Alejandro Ferrari, Mariano Echenagucia y Luis Barbagelata; tesorero José María Palma; vocales, Dr. Tomás Canevaro, Dr. Francisco Arzeno, José Areco, T. Fidanza, Manuel Guevara, Benito Casal, Vicente Roldán, Atanasio Iturbe, Ricardo Riobro, Federico Cánega, Ricardo Bavio, Manuel Valenzuela, Santiago Corti, Julio Noris, Andrés Giudici, Bernardo Arzeno, JuanB. Galialo, Tomás Mata y E. R. Goyeneche.
El Dr. Manuel A. Montes de Oca, invitado por el presidente a hacer uso de la palabra, recordó la importancia del acto de la inscripción aludiendo al estado deplorable porque atravesaba la república, el cuál, dijo reclamaba el celoso cumplimiento de los deberes cívicos.
A pedido de la concurrencia hablaron el doctor Emilio Gouchón, y los señores Tomás Santa Coloma, Arturo de la Serna y Casal.
El dr.Gouchón saludó en los presentes a los vencedores de la primera jornada, pudiendo y debiendo considerarse como un triunfo sobre la deplorable inacción que dejaba el campo libre al abuso y a la inmoralidad, la fundación de numerosos centros políticos de opinión independiente.
Agregó que el triunfo de la causa popular era inevitable. La victoria definitiva coronaría sin duda alguna tan nobles esfuerzos, perseverando en ellos con patriótica dedicación. La historia de nuestra organización política está llena de ejemplos de lo que puede la acción popular al servicio de las buenas causas.
El Sr. Santa Coloma hizo referencia en breves palabras a la sentida necesidad de una poderosa reacción cívica qu erestableciese el pleno ejercicio del derecho electoral.
El Sr. de la Serna comparó a las libertades públicas con una hermosa columna levantada por el esfuerzo de nuestros antepasados, que manos aleves habían tronchado; dijo que entre esas manos figuraban principalmente las del presidente de la república, primer resonsable del despojo de los derechos constitucionales.
Expresó su confianza de que el pueblo recuperaría al fin esos derechos sagrados, y terminó dando un viva a la patria argentina, que fue contestado con entusiasmo.
El Sr. Casal, antiguo y respetable vecino de la parroquia de San Telmo, dijo que había querido asociarse al patriótico movimiento que se iniciaba en la capital, el que en el caso de su existencia le hacía entrever en un porvenir cercano, la regeneración de la patria y el restablecimiento de sus instituciones; agregó que su sangre recobraba el ardor de los primeros años, tratándose de servir a la patria, y que la Unión Cívica podía contar con sus débiles fuerzas en la noble tarea que había emprendido!
Las efusivas palabras del Sr. Casal fueron recibidas con marcadas muestras de simpatía."




Continuación de la crónica sobre la organización de los diferentes Clubes Parroquiales de la Unión Cívica, entre 1889 y 1890. Información transcripta del libro "El 90 - Orígenes, organización y tendencias de la Unión Cívica - Relación histórica", editado por Jorge W. Landenberger y Francisco M. Conte, Edición Oficial de la Unión Cívica, 1890.

"CLUB DE SAN JOSE DE FLORES

El 7 de Octubre de 1899 quedó instalado el club independiente en San José de Flores.

Hicieron uso de la palabra los doctores Enrique S. Quintana y Alberto C. Diana, nombrándose para dirigir al nuevo centro, a las siguientes personas:Presidente honorario, Dr. Pedro Goyena; comisión ejecutiva: presidente, Dr. Enrique S. Quintana; vicepresidentes, 1º, Dr. Mariano R. Martínez, 2º, Alfredo Fragueiro Frías; secretarios, Ricardo del Campo, Manuel F. Gueco, Pedro J. Naón, Juan T. Avalos, tesorero, Eleodoro Montarcé; protesorero, José G. Manrique.Comisión de propaganda: presidente, Dr. Alberto C. Diana; vicepresidentes, Manuel J. Sanabria, Dr. Antonio M. Silva; secretarios, Justo González Acha, Juan Caros Raíces, Eleodoro Montarcé (hijo), Mariano P. Barilari.Vocales: Cupertino del Campo, Pedro Fragueiro, Juan Y. Mansilla, Severo Pacheco, Enrique Montarcé, Carlos Guedes (hijo), Manuel B. Domato, Enrique Zapata, José María Fonseca, Rufino Seguí, Matías Cardoso (hijo), Leopoldo Domato, Teodoro Vila, P.J. Cambas, Cupertino del Campo (hijo), Nieves Montarcé, Jsé M. Martínez, Raúl Manrique, Juan Angel Bearuti, Enrique Fragueiro, Rafael Vila, Sandalio Mansilla, Mateo Domato, Manuel Sanabria, Cándido Montarcé, Pablo Vila, José María Barsola, Ramón Sardá, Alejandro A. Stornelli, Juan A. Castaño, Felipe Cateura, José F. Aranguren, Alberto Romeiro, José Cerrutti, Alterto C. Tay, Juan Silve, Julio Ladvocat, Arturo C. Romeiro, Manuel E. Villamayor, Juan A. González Rubio, Juan Carlos Castex, Fernando Beade, Bartolomé Pereira, Antonio Montarcé, Baldomero Videla, Carlos J. García, José J. Silveira, Juan Agustín Andrada, Néstor Carvalho, Carlos González Acha, Ramón D. Dirube, Felipe Vidal, Carlos Peña, Carlos Martínez, Alberto Martínez, Gicandro Dorr (hijo), Carlos Devicenzi, Santiago Ferrari, Carlos Guedes.

La reunión fue numerosa y entusiasta.

CLUB DE BALVANERA

El domingo 20 de Octubre de 1899, tuvo lugar en el teatro Doria la instalación del Club Unión Cívica, de la parroquia de Balvanera.

La concurrencia pasaba de seiscientas personas.A las 2 p.m. se dio comienzo al acto con el himno nacional, ejecutado por una banda de música.

El señor Cleto Santa Coloma, dio cuenta en breves palabras del objeto de la reuníon, cediendo la palabra al doctor Jorge Morris, que pronunció un conceptuoso discurso.

El doctor Morris se extendió en consideraciones sobre el estado político del país; dijo que la indiferencia por el ejercicio de los derechos cívicos, conduciría a la dictadura, consigno castigo de un pueblo que cae en la abyección política. Refiriéndose a la actitud que les corresponde asumir a los ciudadanos, dijo:

“Deber nuestro es pues, conjurar tan siniestra perspectiva, concurriendo unidos a los comicios, exhortando a los indiferentes al cumplimiento de sus deberes cívicos, demostrándoles que en la actualidad la indiferencia es sinónimo de traición, de delito de lesa patria, y teniendo presente esta dura pero irrefutable verdad: no gozar de la libertad, es de bestias; perderla, de cobardes”.

Siguió al doctor Morris en el uso de la palabra el Dr. Carlos Estrada, quien hizo un ligero bosquejo de los acontecimientos, que dieron por resultado la desaparición del régimen constitucional y de la autonomía de las provincias. Dijo que éstas habían perdido su autonomía; unas por la acción de la fuerza, las otras mediante pactos inmorales, sinedo ejemplo de lo primero las provincias de Tucumán, Córdoba y Mendoza. “Tucumán, dijo, en donde murió Avellaneda, defendiendo la libertad contra el tirano; Avellaneda que sintetizó su abnegación heroica en aquellas últimas palabras dirijidas al verdugo: “acaba pronto, bárbaro!”.“Estoy seguro que los hijos de Tucumán han de haber apretado muchas veces los labios para no exclamar, también siguiendo los impulsos del corazón, estas otras palabras, reflejo de las del mártir, y dirijidas a los conculcadores de sus libertades: “acabad presto, liberticidas!”“Córdoba, entre cuyos hijos se cuenta el general Paz, que dedicó su vida a combatir la tiranía, y el doctor Vélez que contribuyó principalmente a la formación de las leyes que hoy inícuamente se conculcan. Mendoza, en donde el general San Martín ideó su gran campaña y formó las primeras tropas que nos dieron libertad y gloria, y sacudieron el yugo del coloniaje para convertirnos en nación, con gobiernos populares, sin distinción de castas ni banderas, y sin reservas de partidos, y sin privilegios de familia que no tienen otro mérito qu eel el éxito; pero ¡qué éxito! El éxito que da el fraude y consagra la fuerza”Pasó luego a considerar la situación económica del país, creada por el desacierto administrativo, y terminó manifestando que la parroquia de Balvanera tiene una tradición electoral gloriosa, a la cual debe permanecer fiel para honor de sus habitantes y el bien de la patria.

El Dr. Francisco A. Barroetaveña pronunció un bello discurso inspirado en los primeros versos del himno nacional, recordando el pasado glorioso de nuestra patria y los deberes que él nos impone.

El doctor Emilio Gouchón, se ocupó del alcance que tiene la fórmula de la “adhesión incondicional” al Presidente de la República, considerándola como la negación de los deberes del ciudadano, como un acto antipatriótico, y como una cobarde claudicación de los más sagrados derechos en un país democrático.

El señor Juan Izquierdo Brown, habló en nombre del Club General Mitre, expresando su confianza en el triunfo de la oposición, si los elementos populares se organizan y entran decididamente a la lucha.

Además de los nombrados, hablaron los señores José M. Mendia, doctor Santiago O’Farrell y el señor Pueyrredón.

El señor Cleto Santa Coloma, cerró el acto, recordando el deber en que están todos los ciudadanos, de concurrir a la inscripción, e invitó a los presentes a cumplir con él.

El doctor Leandro N. Alem, que no pudo asistir por hallarse indispuesto, envió la siguiente carta, cuya lectura fue saludada con grandes aplausos:

“Distinguidos compatriotas

Siento verdadero pesar al comunicarles que por inconvenientes imprevistos y de último momento, no me es posible asistir a la reunión; y pido a ustedes y demás conciudadanos iniciadores, quieran tener la bondad de aceptar mi excusa. Desde aquí, sin embargo, yo estoy con ustedes, adhiriéndome calurosamente a los nobles y elevados propósitos que los conducen, y aplaudiendo del mismo modo el bello movimiento de ese vecindario, que con tanta abnegación y virilidad, supo siempre sostener sus convicciones en aquellas grandes luchas de la democracia, cuando todos íbamos impulsados por sentimientos y aspiraciones honrosos, buscando solamente la estima de nuestros conciudadanos con la noble emulación de hacer el bien para la patria querida.

Salud, pues, a todos los verdaderos y sinceros patriotas; y creedme que en los momentos arduos de la lucha, si ella se acentúa, he de ocupar sin vacilación, el puesto que mis correligionarios me señalen.-

Salud.

L. N. ALEM”

Octubre 20 de 1899.



La Comisión Directiva del Club Unión Cívica, de Balvanera, ha quedado definitivamente constituída de esta manera:Presidentes honorarios: Bartolomé Mitre, doctor Leandro N. Alem.Presidente: Dr. Jorge Morris.Vice-Presidente 1º, Alfredo C. Ponce.Vice-Presidente 2º, Félix M. Chaves Paz.Tesorero, Antonio Azpeitía.Pro-Tesorero, Juan Mac-Kiernan.Secretario General, Cleto Santa Coloma.Pro-Secretario General, Juan Izquierdo Brown.Secretarios: Carlos Fernández, Alfredo F. Plot, Cayetano M. Ilurburu, Eduardo Almagro, José A. Mastai, N. Morris.Vocales: Rufino de Elizalde, Dr. Aurelio Gómez, Benjamín Nogueras, Honorio Sein, Edelmiro R. Goyeneche, Eduardo P. Fernández, Eduardo Benítez, José María Mendía, José F. Sánchez, Daniel Mac-Kiernan, Juan Rébora, Nicasio Ramírez, Vicente Calcagno, Domingo Matheu, M. Ruíz Moreno, Francisco Soto, Federico Monereau, Cayetano Grimau Gamboa, Dr. Santiago O’Farrell, Casimiro Robles, Juan M. Llames, Eduardo Jorge, Alberto E.Díaz, Juan Salabert, Ricardo López, Enrique J. Mazzoletti, Guillermo L. Bayley.

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