RICARDO ALFONSIN
PRESIDENTE 2011-2015
ELECCIONES 2011: TRES VUELTAS Y DOS OPCIONES
por Hernán Rossi*
El 14 de agosto los argentinos participaremos de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias, llamadas comúnmente “PASO”, y con ello daremos paso a un proceso electoral de tres vueltas, algo sin precedentes en la historia argentina.
Pese a lo grandilocuente de su nombre (Ley de Democratización de la Representación Política, la Transparencia y la Equidad Electoral), las PASO son lisa y llanamente un sistema de selección de candidatos. El sistema consiste en una elección obligatoria en la que los distintos partidos o frentes electorales presentan diferentes listas que compiten entre ellas para que la ciudadanía elija quienes representarán al partido en las elecciones generales.
Todos los ciudadanos tienen el derecho y el deber de votar en alguna interna, es decir que deben seleccionar una boleta para Presidente y Vicepresidente, una lista de Senadores y una lista de Diputados, que puede ser de la misma agrupación política o cortando boleta. Lo que no se puede hacer es seleccionar dos boletas para los mismos cargos.
Lo particular de las PASO es que, salvo la UCR que llevó adelante un proceso interno de selección de candidatos que culminó con la nominación de Ricardo Alfonsín, las diferentes fuerzas políticas no han debatido ni presentado diferentes alternativas frente al electorado, por lo que llegan a las Primarias con listas definidas a través de la famosa “dedocracia”. Esto nos lleva a una situación en la que en vez de cumplir el rol para el que fueron pensadas, las PASO se convierten nada menos que en una virtual primera vuelta electoral, donde las distintas fuerzas políticas van a medir su fuerza y volumen electoral.
Sin embargo, y a diferencia de lo que se plantea en algunos círculos, yo no soy de los que creen que las PASO deberían suspenderse porque no tienen sentido. Por el contrario, creo que las PASO van a ser determinantes por diferentes cuestiones. En primer lugar, las PASO van a servir para desmitificar las encuestas que el oficialismo está haciendo circular por sus medios de comunicación. En segundo lugar, las PASO son determinantes para aquellas fuerzas de baja representatividad, como el llamado Frente Amplio, o la Coalición Cívica, ya que de acuerdo al caudal de votos que obtengan (si logran superar los mínimos impuestos en la ley) se verá si podrán presentar fórmulas presidenciales en octubre, o si podrán presentar listas a Diputados y Senadores en todos los distritos. En tercer lugar, porque de las PASO, la UCR como médula espinal de la Unión para el Desarrollo Social (UdeSO) quedará fuertemente identificada como la única fuerza de oposición con posibilidades reales de acceder al ballotage.
Cuando Cristina no logre satisfacer las expectativas (disparatadas por cierto) que plantean los medios de comunicación afines al oficialismo, y cuando las diferentes fuerzas políticas no cumplan los mínimos necesarios para presentar fórmula presidencial, o legisladores nacionales en todos los distritos, la UCR emergerá de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias como la fuerza que polarizará con el kirchnerismo en las elecciones de octubre y todos aquellos que quieran un cambio en la Argentina se inclinarán por Ricardo Alfonsín.
El kirchnerismo ideó la mal llamada “reforma política” pensando en su propio beneficio, pero la historia les ha jugado una mala pasada y ahora se encuentran a la espera de lo que inexorablemente será el comienzo del fin para ellos.
La Unión para el Desarrollo Social (UdeSO), frente que integra la UCR, es la única y verdadera alternativa al gobierno, por tradición, por representatividad y por estructura. No hay ninguna otra fuerza que pueda garantizar un proceso de mejora, manteniendo las cosas que se han hecho bien, pero generando un fuerte proceso de desarrollo y de mejora en la calidad de nuestra democracia, para dar fin a las prácticas corruptas y clientelares a las que nos tiene acostumbrados el oficialismo.
En este año electoral de tres vueltas, solo hay dos opciones: la continuidad del kirchnerismo en su estado más puro, o comenzar un proceso de desarrollo que encarna la figura de Ricardo Alfonsín.
El 14 de agosto acudamos a las urnas sabiendo que en nuestro voto está la clave para definir al próximo Presidente de la Argentina.
*Hernán Rossi, candidato a diputado nacional U.C.R. por Ciudad de Buenos Aires
http://hernanrossi.com/2011/07/04/elecciones-2011-tres-vueltas-y-dos-opciones/
PRESIDENTE 2011-2015
ELECCIONES 2011: TRES VUELTAS Y DOS OPCIONES
por Hernán Rossi*
El 14 de agosto los argentinos participaremos de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias, llamadas comúnmente “PASO”, y con ello daremos paso a un proceso electoral de tres vueltas, algo sin precedentes en la historia argentina.
Pese a lo grandilocuente de su nombre (Ley de Democratización de la Representación Política, la Transparencia y la Equidad Electoral), las PASO son lisa y llanamente un sistema de selección de candidatos. El sistema consiste en una elección obligatoria en la que los distintos partidos o frentes electorales presentan diferentes listas que compiten entre ellas para que la ciudadanía elija quienes representarán al partido en las elecciones generales.
Todos los ciudadanos tienen el derecho y el deber de votar en alguna interna, es decir que deben seleccionar una boleta para Presidente y Vicepresidente, una lista de Senadores y una lista de Diputados, que puede ser de la misma agrupación política o cortando boleta. Lo que no se puede hacer es seleccionar dos boletas para los mismos cargos.
Lo particular de las PASO es que, salvo la UCR que llevó adelante un proceso interno de selección de candidatos que culminó con la nominación de Ricardo Alfonsín, las diferentes fuerzas políticas no han debatido ni presentado diferentes alternativas frente al electorado, por lo que llegan a las Primarias con listas definidas a través de la famosa “dedocracia”. Esto nos lleva a una situación en la que en vez de cumplir el rol para el que fueron pensadas, las PASO se convierten nada menos que en una virtual primera vuelta electoral, donde las distintas fuerzas políticas van a medir su fuerza y volumen electoral.
Sin embargo, y a diferencia de lo que se plantea en algunos círculos, yo no soy de los que creen que las PASO deberían suspenderse porque no tienen sentido. Por el contrario, creo que las PASO van a ser determinantes por diferentes cuestiones. En primer lugar, las PASO van a servir para desmitificar las encuestas que el oficialismo está haciendo circular por sus medios de comunicación. En segundo lugar, las PASO son determinantes para aquellas fuerzas de baja representatividad, como el llamado Frente Amplio, o la Coalición Cívica, ya que de acuerdo al caudal de votos que obtengan (si logran superar los mínimos impuestos en la ley) se verá si podrán presentar fórmulas presidenciales en octubre, o si podrán presentar listas a Diputados y Senadores en todos los distritos. En tercer lugar, porque de las PASO, la UCR como médula espinal de la Unión para el Desarrollo Social (UdeSO) quedará fuertemente identificada como la única fuerza de oposición con posibilidades reales de acceder al ballotage.
Cuando Cristina no logre satisfacer las expectativas (disparatadas por cierto) que plantean los medios de comunicación afines al oficialismo, y cuando las diferentes fuerzas políticas no cumplan los mínimos necesarios para presentar fórmula presidencial, o legisladores nacionales en todos los distritos, la UCR emergerá de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias como la fuerza que polarizará con el kirchnerismo en las elecciones de octubre y todos aquellos que quieran un cambio en la Argentina se inclinarán por Ricardo Alfonsín.
El kirchnerismo ideó la mal llamada “reforma política” pensando en su propio beneficio, pero la historia les ha jugado una mala pasada y ahora se encuentran a la espera de lo que inexorablemente será el comienzo del fin para ellos.
La Unión para el Desarrollo Social (UdeSO), frente que integra la UCR, es la única y verdadera alternativa al gobierno, por tradición, por representatividad y por estructura. No hay ninguna otra fuerza que pueda garantizar un proceso de mejora, manteniendo las cosas que se han hecho bien, pero generando un fuerte proceso de desarrollo y de mejora en la calidad de nuestra democracia, para dar fin a las prácticas corruptas y clientelares a las que nos tiene acostumbrados el oficialismo.
En este año electoral de tres vueltas, solo hay dos opciones: la continuidad del kirchnerismo en su estado más puro, o comenzar un proceso de desarrollo que encarna la figura de Ricardo Alfonsín.
El 14 de agosto acudamos a las urnas sabiendo que en nuestro voto está la clave para definir al próximo Presidente de la Argentina.
*Hernán Rossi, candidato a diputado nacional U.C.R. por Ciudad de Buenos Aires
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