BLOG POR LOS DERECHOS HUMANOS
IGUALDAD RACIAL
NELSON MANDELA, 20 AÑOS DE SU LIBERACIÓN
http://www.youtube.com/watch?v=s-rBNzVRBxs
Sábado 6 de febrero de 2010/ Redacción: Fernando Ríos/ Edición: Gastón Fedeli/ Visión Siete Internacional/ Durante 27 años fue sólo un número. El preso 466. Así lo llamaban los carceleros que lo sometían a trabajos forzados en las canteras del penal de Robben Island.
Pero aquel 11 de febrero de 1990 la televisión multiplicó una imagen distinta de aquel prisionero. De la mano de su esposa Winnie y con el puño en alto, Nelson Mandela abandonaba por fin la prisión y comenzaba un nuevo capítulo en su lucha contra el apartheid en Sudáfrica.
Estas políticas racistas conformaron el sistema de dominación social impuesto por los gobiernos blancos de ese país durante la mayor parte del siglo XX. Bajo estos parámetros, los grupos étnicos originarios eran privados de sus derechos básicos, de votar, estudiar, trabajar o circular libremente por las calles. El andamiaje legal que lo sostenía era obra del Partido Nacional, que llegó al poder en 1948, y se estructuraba a través de una serie de leyes puntuales.
Una de ellas prohibía los matrimonios mixtos; otra, denominada “Ley de Inmoralidad”, convertía cualquier acto sexual entre una persona blanca y otra negra o mestiza en una ofensa criminal. A estas leyes siguieron las de separación racial en los centros urbanos, la clasificación por el color de piel y la asignación o negación de derechos de acuerdo con esos parámetros.
Contra ese sistema luchó “Madiba”, el título honorario de su clan por el que se conoce a Mandela en Sudáfrica. Y por ello pagó con años en las prisiones del régimen.
Su nombre había comenzado a trascender en los años 50 como líder emergente del Congreso Nacional Africano y con sus posturas a favor de la desobediencia civil. Su activismo lo lleva a la cárcel en 1956. Cuando es liberado en 1961, adhiere a los nuevos activistas, los africanistas, que postulaban acciones drásticas contra el régimen, incluyendo la lucha armada.
Por entonces viaja a Argelia de incógnito y vuelve a su país en 1963 a reorganizar la resistencia. Allí es nuevamente detenido y recluido en prisiones de máxima seguridad. Durante aquellos años rechaza ofertas para reducir la sentencia a cambio de renunciar a la lucha armada. “Los prisioneros no pueden asumir contratos. Sólo pueden negociar los hombres libres”, responde a sus captores.
Por eso sorprendió su liberación en febrero de 1990, a poco de iniciado el gobierno de Frederick De Klerk, el último blanco en presidir Sudáfrica.
De Klerk estimaba que Mandela libre sería un problema menos para su gobierno, golpeado por la insurrección popular y las sanciones económicas internacionales por su política racista. Confiaba además que luego de 27 años preso, el viejo líder de 72 años no ganaría nuevos adeptos.
Pero Mandela no había renunciado a la lucha, sólo había modificado su acción. Pronto dejó un mensaje de reconciliación. El enemigo no son los blancos, sino el apartheid, dijo.
El gobierno respondió legalizando el Congreso Nacional Africano, que había sido proscrito treinta años antes. De a poco se fue desarmando así el aparato legal sobre el que se edificó el apartheid. En marzo de 1992, la última vez en que sólo votaron blancos, un referéndum dio facultades para consensuar una nueva Constitución. Este paso les valió a Mandela y a De Klerk el Premio Nobel de la Paz en 1993.
Pero mientras tanto el país se desangraba. Las luchas entre grupos étnicos cobraban miles de vidas. El gobierno consideró entonces que Mandela era la solución y accedió a celebrar comicios multirraciales. Aquella histórica elección permitió que 16 millones de negros pudieran votar por primera vez. Mandela triunfó con el 60 por ciento de los sufragios y derrotó a De Klerk.
Cuando asumió, en medio de una gran expectativa, el 50 por ciento de la población negra era analfabeta y vivía en condiciones paupérrimas.
“No esperen milagros”, les dijo. Pero que un negro hablara como presidente de Sudáfrica hacía pensar que uno de ellos ya se había cumplido. No obstante su gobierno, debido quizás a la magnitud de la tarea, culminó sin lograr la ansiada igualdad social.
Hoy, a poco de cumplir 92 años, el hombre que cambió la historia, el primer presidente negro de su país, podría sintetizar su vida con las pocas palabras que pronunció cuando fue condenado: “He deseado una sociedad libre, en que todas las personas vivan en armonía y con iguales oportunidades. Es un ideal con el cual quiero vivir. Pero si fuese necesario, es también un ideal por el cual estoy dispuesto a morir”. © Noticiero Visión Siete/ TV Pública/ Argentina
FREE NELSON MANDELA
http://www.youtube.com/watch?v=TvtwWGEQh_U
TRAILER DE PELÍCULA INVICTUS DE CLINT EASTWOOD
SOBRE LA VIDA DE NELSON MANDELA
http://www.youtube.com/watch?v=a6FLLCrCj00
MANDELA Y SUS DOS AMORES POR PABLO MILANES
Nelson mandela,
Quiero decirte que no vengo a cantar
La parte triste de una canción
Que nos haga llorar.
Nelson mandela,
Quiero pedirte que me dejes contar
La más hermosa historia de amor
Que nos pueda llegar.
Nelson mandela,
Desde que tú naciste
Ya todo lo que hiciste
Fue vivir para que un día
Se tuvieran que encontrar.
Mandela,
Que encuentro tan fecundo
Poder cambiar tu mundo
Y el modo tan hermoso
De quererlo eternizar.
Nelson mandela,
Y como pólvora regaste el amor
Que te sostiene en una prisión
Que te va a liberar.
Qué feliz que en una historia de amor
Todo un pueblo encierre su libertad,
Qué feliz que en una historia de amor,
Todo un pueblo encierre su libertad.
http://www.youtube.com/watch?v=ffPzPvIuzIo
miércoles, 10 de febrero de 2010
Publicado por
Gustavo Angerame
Etiquetas:
DERECHOS HUMANOS,
HITOS MUNDIALES,
INTERNACIONALES,
NELSON MANDELA
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