UCRÓSTICO A CRISOLOGO (Por Gustavo Angerame)
Cuna de conventillo, hijo de obrero,
Rojinegra fue la bandera de su juventud,
Insignia que cambia por nuestra boina blanca radical,
Su sensibilidad social se emparentaba con la Causa de Alem.
Opositor acérrimo de fraudes y tiranías,
Luchador al ultranza en defensa de los trabajadores
Opositor acérrimo de corruptelas y demagogias,
Gladiador en las tribunas, con su sueño libertario, igualitario y fraternal
Opositor acérrimo de vendepatrias y fascismos,
Llamó las cosas por su nombre: "bestia implacable" al capitalismo
A los marxistas retó por tomar como "prejuicio burgués" la libertad
Reforma agraria en su pensar y en su discurso era escencial
Radical yrigoyenista, popular y revolucionario
Artículo catorce bis, su aporte a la Carta Magna
Legislación y compromiso social
Documento de Avellaneda, parte de su obra y
El Escrito al caudillo inmortal definen a este hombre sin igual.
Escrito al Caudillo Inmortal (Crisólogo Larralde) -Fuente JR Nacional Web-
“Saludo en Jesús al caudillo inmortal; al predicador de la libertad, de la igualdad entre los hombres, al demócrata cabal y al mas austero y respetable gobernante de almas. Al padre cuyo ejemplo nos sigue probando como, la muerte, es únicamente ausencia de moral y alta conducta".
"Reverencio en Jesús a quien señaló iluminados senderos de desinterés, de solidaridad, de tolerancia, de justicia, de perdón y de amor; al flagelado, humillado y escarnecido cuya imagen se alza imperecedera y victoriosa sobre la desolación de un mundo ennegrecido por los odios políticos, menguados en las luchas colmadas de felonías, parcelado por el egoísmo y las ambiciones de riqueza y de poder".
"Saludo en El, al padre y al maestro, al docente histórico y mayúsculo en los combates contra los privilegios y las huecas jerarquías, al orientador cuya presencia invocamos de continuo para marchar en la dirección de su índice hacia los horizontes sin guerras, sin clases, sin odios raciales, sin explotación y sin miseria".
"Si a EL –proveedor inagotable- pudiéramos pedirle algo, rogaríamos su luz para los argentinos, tan necesitados de entendernos en la realización de un esfuerzo común por la reconstrucción de nuestro solar nativo con las solas manos, la sola sangre, la sola voluntad heredadas del seno materno. Invocándolo por imperio del sentimiento cristiano, concédaseme expresar a mí, hombre de lucha, mi esperanza de un año, comienzo de otros muchos, de cordialidad entre los argentinos y de consolidación nacional. Ninguna palabra, de esas sonoras pero agrias palabras de los combatientes políticos, cabe decir, sin agraviarlo, en estas pocas y pobres de homenaje a Jesús. Cuando El vivió entre los hombres –entre los desnudos y analfabetos hombres del pueblo- señaló rumbos cuyo abandono significó caer en la conducta ignominiosa, en el rencor implacable, en la cobardía abyecta, en la defección culpable".
"Político, piedra dura y oscura de la inmensa cantera popular, con mis cantos pulidos de tanto combatir, paréceme irreverente aludir a la sustancia de nuestros apasionados desencuentros en cuya entraña vibran las estridencias de un combate por objetivos a menudo personales, casi siempre transitorios. Digamos, pues, pensando en El, esta Navidad nos mejore a todos, nos reconcilie y nos enseñe como, en el desprecio de todo poder está todo el poder”
1 comentario:
muy bueno el recuerdo a don crisologo larralde. un abrazo
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